lunes, 14 de noviembre de 2011

La bomba de la deuda europea a punto de explotar


Si una imagen vale más que mil palabras, un gráfico del New York Times vale más que un millón. Nada mejor que este diagrama para entender de una vez qué es la crisis de la deuda, qué países están implicados, qué cifras de dinero se están moviendo y lo más importante, qué nos depara el futuro.

Empecemos. El gráfico, que para verlo más en detalle tenéis que hacer click sobre el link, representa dos cosas. Por un lado los círculos representan los países, el tamaño de estos depende del nivel de deuda, es decir, de la cantidad de dinero que debe a otros países, bancos, individuos etc... Las líneas que unen unos círculos con otros representan la cantidad de dinero que debe cada país al resto. Este dinero se debe no sólo al país en cuestión sino a bancos u otras entidades financieras radicadas en ese país. Por ejemplo de los casi 54 mil millones de dólares que Grecia debe a Francia, buena parte se debe a los bancos franceses. Por tanto una vez entendidos estos dos aspectos podemos visualizar más claramente el gráfico. 

A priori destacan los círculos que representan a EEUU, Japón, China, Alemania y Reino Unido. Son los países que más deuda tienen, pero también son los países con un peso económico más grande y por tanto su ratio deuda/pib no tiene porqué ser tan elevado como parece. Pero en el caso de EEUU, Japón o Reino Unido, sí que se trata de países con altos niveles de endeudamiento. La diferencia respecto a países como Italia, Grecia o España, que suelen acaparar las portadas de los medios, es que estos últimos tienen dificultad en financiarse debido a su mala situación económica, y por ello tienen que pagar unos intereses muy altos, cosa que no tienen que pagar Japón, Reino Unido o EEUU. El problema viene cuando un país llega a un punto que no es capaz de financiarse debido a los altos intereses que los acreedores (los mercados) piden debido al  riesgo de la inversión por la mala situación de estas economías. A este punto ya han llegado 3 países, Grecia, Irlanda y Portugal. Por eso están en rojo en el gráfico. Los tres países llegaron a un punto (Grecia en primavera de 2010, Irlanda en otoño de 2011 y Portugal en primavera de 2011) en que tuvieron que ser "rescatados" por la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional. Este rescate consistía en que recibían unas sumas de dinero a un interés menor que el del mercado a cambio de que redujeran su deuda, principalmente mediante medidas de austeridad y recortes del gasto público. Este modelo se ha aplicado en las tres economías y ha demostrado ser un modelo erróneo, ya que el interés de la deuda de estos países sigue subiendo a la vez que las medidas de austeridad exigidas a sus gobiernos son cada vez más duras e insostenibles para la población.

A la vez que en Grecia, Portugal e Irlanda la situación ha ido empeorando, otros países se han ido acercando al peligroso punto de no retorno donde los intereses que un Estado tiene que pagar para financiarse son insostenibles. Los dos países que más cerca están de rebasar ese nivel son Italia y España. Por tanto se plantean dos problemas. Primero, que las economías ya rescatadas (Grecia, Portugal, Irlanda) sigan en unos niveles de deuda insostenibles y se vean abocadas a declarar una bancarrota. Esto supone que dejan de pagar sus deudas y que los bancos de otros países europeos pierden todo su dinero invertido en la deuda del país en bancarrota. Esto sería un fenómeno muy peligroso ya que cómo veis en el gráfico las deudas están entrelazadas y podría causar un efecto dominó. Utilizando el ejemplo de Grecia, que es el país más claramente en riesgo de entrar en bancarrota, los acontecimientos podrían sucederse de la siguiente manera. Si Grecia entra en bancarrota supone que Francia y sus bancos pierden 53,9 mil millones de dólares y Alemania 19,3, pero lo que es peor, las maltrechas economías de Portugal e Italia ya de por si en zona de riesgo de bancarrota o de ser rescatadas perderían 10,1 mil millones de dólares y 3,2 respectivamente. Esto podría ser la puntilla para Portugal, ya de por sí muy endeudada y cuyos bancos tienen un importante porcentaje de la deuda griega, una bancarrota griega podría muy fácilmente llevar a otra portuguesa. Si Portugal entra en bancarrota la espiral continuaría, 62 mil millones de dólares de la deuda portuguesa pertenecen a España y sus bancos, tan enorme cantidad dejaría a España al borde del rescate y el efecto continuaría caóticamente.

El otro problema que se cierne sobre Europa es que al contrario que en los casos de Grecia, Portugal e Irlanda, hay países que debido al peso de su deuda no podrían ser rescatados, estamos hablando de España pero sobre todo de Italia. Italia lleva ya días en niveles insostenibles, con unos intereses en torno al 6-7% de los bonos de deuda a 10 años el país transalpino está al borde del rescate. Grecia, Irlanda y Portugal fueron rescatadas cuando llegaron a este nivel. El problema es que no hay dinero suficiente para ese rescate. Como podéis ver en el gráfico el peso de la deuda italiana es muy superior a la irlandesa, portuguesa y griega combinadas. ¿Qué pasaría entonces si Italia continúa en estos niveles insostenibles y no puede ser rescatada? Tras días leyendo artículos y escuchando a expertos en los diferentes medios mi respuesta es que nadie tiene una respuesta, pero está claro que nada bueno. Espero por tanto que haya quedado claro el problema de la deuda en Europa, aunque queda mucho que contar sobre todo explicar el porqué hemos llegado a esta situación o quién se está beneficiando de todo esto, pero de eso hablaremos en otro post. 

He estado un poco ausente del blog, pero tiene su explicación, estoy metido en un proyecto nuevo del que ya os hablaré y que traerá también cambios al blog.


Si queréis el gráfico interactivo lo podéis ver aquí http://www.nytimes.com/interactive/2011/10/23/sunday-review/an-overview-of-the-euro-crisis.html

viernes, 14 de octubre de 2011

Alberto Joao Jardim, el cacique del Atlántico



La democracia es sin ninguna duda el mejor sistema político que ha inventado hasta ahora el ser humano, aunque dista mucho de alcanzar su máximo potencial y desarrollo. Algunos (los muchos) dirán que es el menos malo de los sistemas, otros (los cada vez más) pedimos una democracia más democrática, de lo que no hay ninguna duda es de que es el sistema preferible para el gran conjunto de la población. Pero la democracia es caprichosa y sus votantes todavía más y de vez en cuando nos regala algún que otra Berlusconi. Estos despojos de la democracia, señal de que no siempre la mayoría tiene la razón, sobre todo si son sociedades con bajo nivel educativo o muy controladas por los medios de comunicación públicos o privados, no son sólo sino excepciones, pero también son ejemplos claros de que una buena democracia tiene que venir acompañada de una sociedad civil formada e implicada. El ejemplo clásico que se utiliza para enseñar el lado oscuro de la democracia es el ascenso de Adolf Hitler gracias a su victoria en las elecciones, aunque se suele omitir que sólo consiguió el 33,1% de los sufragios y que sólo llegó al poder gracias al entreguismo de otros partidos. Pero volviendo a tiempos más modernos, la democracia nos sigue sorprendiendo y son cada vez más los políticos corruptos, populistas, autoritarios etc... los que ganan elecciones tras elecciones, seguramente se os ocurrirán numerosos ejemplos. En este caso hablaré de un político que entra dentro de esta denominación de despojos de la democracia, es un personaje bastante desconocido pero no por ello menos interesante, sólo un dato, es el líder que más años lleva en el poder democráticamente. Su nombre es Alberto Joao Jardim, es el presidente de la región autónoma insular de Madeira, perteneciente a Portugal, lleva 33 años en el poder y acaba de ganar su décima elección consecutiva.

Situación de Madeira
Muy conocido en Portugal pero desconocido en el resto del Mundo, Jardim es desde 1978 presidente de la región de Madeira, formada por la isla atlántica de Madeira, conocida por sus vinos, y con una población de tan sólo 200 mil habitantes. Representa lo peor de lo que la democracia es capaz, su total desprecio a esta; es caciquil, populista, autoritario y maquiavélico. Proviene del salazarismo puro y duro que gobernó a la entonces pobre y abandonada Madeira durante los años de la dictadura. Su tío era el representante del régimen en la isla y él pronto entró en el mundo político, inicialmente como soflamador periodista de la derecha más rancia. Una vez llegada la democracia, se democrátizó, (fenómeno muy curioso y que se repitió de forma masiva al otro lado de la frontera portuguesa) y fue cofundador del  Partido Social Demócrata (PSD) junto a personajes históricos del centro-derecha portugués como Pinto Balsemao y Sa Carneiro.  Muy a sabiendas de que su clientela potencial estaba en Madeira, Jardim decidió convertirse en el hombre fuerte del PSD en Madeira, y no sólo lo consiguió sino que convirtió al PSD de Madeira en un partido político diseñado y moldeado a su medida. Desde que ganase las primeras elecciones en 1978 hasta el pasado 9 de octubre, Jardim ha ganado 10 elecciones regionales consecutivas. La última con un 48% de los votos que suena a derrota ya que en las anteriores de 2007 casi llegó al 64% de los votos. Es por tanto el líder elegido en las urnas que más tiempo lleva en el poder.

Habiendo sido un personaje nacido y crecido en el contexto autoritario y caciquil de la Madeira del salazarismo Jardim desarrollaría un modo de hacer política que no decepcionaría a los nostálgicos de la dictadura. Sus formas son autoritarias y no tiene ningún respeto por los miembros de la oposición. Hace 2 años llegó a proponer la prohibición del comunismo en Madeira, lo que demuestra la calidad democrática del personaje. Culpa de todos los males al gobierno de Lisboa, sea este de su partido, el PSD o del Partido Socialista. Ha cimentado su poder sobre el ladrillo y el turismo y no duda en reclamar la independencia de la isla cuando desde Portugal no ceden a sus demandas. Su poder esta basado en tres pilares: el control de los medios de comunicación, una red caciquil de funcionarios y la financiación que consigue de la Unión Europea y del régimen autónomo del que goza la isla. Los medios de comunicación públicos están totalmente controlados por Jardim y los privados reciben subvenciones públicas. De una población activa de 120 mil trabajadores, el Estado emplea a 30 mil funcionarios. Todo ello financiado gracias al régimen fiscal especial que le permite recaudar todos los impuestos de la isla sin dar nada a Lisboa, además del dinero recibido del Estado Portugués por la insularidad de la región (300 millones anuales) y  el dinero llegado de la UE (2 mil millones en los últimos 15 años). Por tanto por paradójico que parezca Jardim basa su poder en una clientela financiada por dinero de la UE y del Estado Portugués. 

El último episodio que ha demostrado lo grotesco del régimen de Jardim ha sucedido hace tan sólo un mes. En el contexto actual de recortes y control del gasto público inspectores del Estado Portugués descubrieron que el gobierno de Jardim había mentido y la deuda de la región ese acercaba los 6 mil millones de euros, más del 100% del PIB de la región y más del doble de lo admitido hasta entonces. Jardim, que había criticado ferozmente al antiguo primer ministro socialista portugués Sócrates por su elevado déficit presupuestario, resulta que había endeudado a su gobierno a unos niveles infinitamente superiores. Por otro lado ante el descubrimiento del engaño Jardim denunció que el Partido Socialista estaba detrás de todo ello, a pesar de que están en la oposición desde hace meses y el primer ministro actual pertenece al PSD, su propio partido. Por otra parte ha vuelto a pedir la independencia de la isla. Órdago insultante ya que si el régimen caciquil de Jardim ha sobrevivido ha sido gracias al dinero que recibe muy generosamente del gobierno portugués y que según las últimas investigaciones no ha sido suficiente para mantener a flote tremenda red clientelar. Pero a pesar de todo Jardim volvió a ganar las elecciones. Seguirá manteniendo un régimen basado en la insostenible financiación con dinero público de una clientela funcionarial y mordiendo continuamente la mano que le da de comer. Eso sí, sus discursos seguirán estando llenos de moralidad, siempre tendrán la culpa los demás, y cualquier ataque a su persona lo convertirá en un ataque a los madeirenses. La pregunta es si personajes como Jardim irán desapareciendo o se convertirán en la tónica general. Mi respuesta es que siempre que haya votantes irresponsables seguiremos hablando de personajes tan denunciables como éste.


martes, 11 de octubre de 2011

Elecciones en Polonia, la victoria de Plataforma Cívica ahuyenta el fantasma de un nuevo gobierno Kaczynsky


El ex primer ministro nacionalista Jaroslaw Kaczynsky es derrotado por segunda vez en las urnas

Por primera vez en dos décadas un primer ministro polaco y su gobierno son reelegidos en unas elecciones democráticas. Donald Tusk, primer ministro y líder de la Plataforma Cívica volverá a formar gobierno gracias a la victoria en las elecciones del 9 de octubre y al apoyo del pequeño pero decisivo Partido Campesino. Los buenos datos económicos y la incapacidad del principal partido de la oposición, Ley y Orden, del ex primer ministro Jaroslaw Kaczynsky de ampliar su base electoral han actuado a favor de Tusk a pesar de que las encuestas no mostraban resultados muy alentadores. Por otro lado un nuevo partido, el Movimiento Palikot, logra entrar en el Parlamento polaco con el 10% de los votos y un mensaje anticlerical y transgresor que supone toda una novedad en la católica y conservadora Polonia.

Donald Tusk
A pesar de la buena gestión económica del primer ministro Tusk y su partido Plataforma Cívica (PO), de tendencia conservadora liberal, las encuestas más recientes apuntaban a un descenso en su intención de voto. Si en 2007 PO obtuvo un 41,5% de los votos, logrando arrebatar el poder a la ultranacionalista Ley y Orden (PiS) del primer ministro Kaczynsky, las encuestas mostraban un acercamiento entre los dos partidos. En la última de ellas PO obtenía un 32% y PiS un 30%; Kaczynsky lograba retener a la mayor parte de sus votantes (en 2007 obtuvo el 32,1% de los votos) mientras que el partido de Tusk perdía a casi un 25% de sus votantes. La izquierda parlamentaria, muy reducida y limitada al partido Alianza de la Izquierda Democrática (SLD), a pesar de alcanzar cotas de popularidad muy altas desde el otoño de 2010, situándose en el 15-20% de los votos (13,2% en las elecciones de 2007) comenzó a hundirse en las encuestas a partir del surgimiento con fuerza del Movimiento Palikot. Este nuevo grupo político, fundado por el extravagante millonario y ex-diputado del PO Janusz Palikot atrajo a partir de septiembre a la población más joven con la defensa de la legalización de la marihuana, los derechos de los homosexuales, la crítica al papel de la Iglesia católica, la defensa del aborto etc.. todas ellas propuestas muy rompedoras en Polonia, país muy conservador y donde la población está situada muy a la derecha del espectro político. Mientras que en las encuestas el Movimiento Palikot (RP) iba subiendo situándose ya en septiembre-octubre por encima del 5% necesario para entrar en el Parlamento, la SLD bajaba a unos niveles inferiores a los de 2007. Por último el Partido Popular o Partido Campesino, socio en el gobierno de Tusk, se situaba en unos niveles constantes, entre el 5-10% de los votos.

Janusz Palikot
A pesar de la incertidumbre sobre el resultado final en las elecciones del 9 de octubre, la PO ha logrado casi alcanzar su resultado de 2007, ha obtenido el 39,2% de los votos pero sólo ha perdido 3 diputados quedándose con 206. Es la primera vez en la democracia polaca que un gobierno y un partido político logran ser reelegidos en las urnas tras un primer mandato. Los buenos datos económicos, Polonia fue el único país europeo en evitar la recesión económica, un crecimiento del 4% y una tasa de paro del 12% han sido determinantes para la victoria de Tusk. Por otro lado Kaczynsky ha casi repetido los resultados de 2007 obteniendo un 29,9% de los votos y perdiendo 8 diputados, quedándose con 158. Sigue siendo la segunda fuerza política y ha logrado mantener a la mayor parte de su electorado con el mensaje nacionalista y antiliberal que le llevó al poder en 2005. En tercer lugar se sitúa el Movimiento Palikot con un 10% de los votos y 40 diputados, siendo la gran sorpresa de las elecciones. Su mensaje anticlerical y transgresor le convierte en un partido clave para el futuro de Polonia durante la próxima legislatura. En cuarto lugar aparece el Partido Campesino, que logra mantener a sus votantes y con el 8,4% de los votos consigue 28 diputados. Por último la SLD se hunde y pasa de 53 a 27 diputados y un 8,2% de los votos. El hundimiento se debe en gran parte a la fuga de votos de su electorado más joven hacia el RP.

Geográficamente Polonia se divide en dos a la hora de votar (mirad el mapa al final del post). La PO es el partido más votado en las circunscripciones del Norte y Oeste del país además de en la capital Varsovia y otros núcleos urbanos. Si miráis el mapa os daréis cuenta de que son exactamente las áreas que pertenecían a Alemania antes de 1945 y por ende, las zonas más industrializadas. En cambio la ultramontana PiS logra ser el partido más votado en el Este y Sur, regiones más rurales y pobres y más sensibles al nacionalismo radical de Kaczynsky. El Partido Campesino es un partido eminentemente rural, en cambio el RP y la SLD logra sus mejores resultados en los centros urbanos.

Con estos resultados la Plataforma Cívica logra ser el único partido en ganar dos elecciones consecutivas y por tanto se consolida como el gran partido del centro-derecha polaco y como eje de todo el sistema político del país ya que ocupa una posición central, con los nacionalistas a la derecha y el RP y la SLD a la izquierda. Los buenos resultados económicos, 3,5% de crecimiento medio de la economía durante los últimos 3 años, han sido su principal baza electoral. A pesar de no contar con mayoría absoluta seguirá gobernando gracias al apoyo del Partido Campesino con el que ha compartido el poder durante los últimos 4 años sin mayores sobresaltos ya que ideológicamente no están muy distanciados, sólo que la PO responde a un electorado más urbano.

A pesar de no haber obtenido la victoria, el partido de Kaczynsky logra aguantar con la mayor parte de sus votantes. Con su discurso nacionalista y retrógado el ex-primer ministro ha logrado movilizar a la Polonia rural y xenófoba que no ve con buenos ojos las buenas relaciones de Tusk con los gobiernos ruso y alemán o el adelgazamiento del Estado polaco por las privatizaciones. Otra de sus medidas estrella ha sido un aumento de los impuestos a los más ricos. Por otro lado Kaczynsky ha utilizado zafiamente la muerte de su hermano gemelo Lech Kaczynsky en un accidente de avión el 10 de abril de 2010 cuando como Presidente de la República se disponía a hacer una visita oficial a Rusia por el 70 aniversario de la matanza de Katyn. Las sospechas sobre la causa del accidente sigue siendo un tema de primer orden en Polonia ya que 95 altas personalidades del Estado polaco murieron en él.

El Movimiento Palikot ha causado una pequeña revolución en una Polonia donde hasta entonces ningún partido se había atrevido a defender causas como el aborto, el matrimonio entre homosexuales, la legalización de la marihuana o criticar el desmesurado poder de la Iglesia Católica. Otras propuestas han sido la prohibición de las clases obligatorias de religión, la retirada de las ayudas del Estado a la Iglesia, la prohibición de que los eclesiásticos participen en actos oficiales del Estado, que el Estado financie la fecundación in vitro y la píldora anticonceptiva o la igualdad de salarios entre hombres y mujeres. Es el partido de los indignados polacos. Lo que demuestran los resultados es que hay un sector de la población, sobre todo joven, que rechaza el sistema polaco basado en el conservadurismo y el catolicismo. El principal problema del partido es que al ser personalista y estar basado en la figura de Janusz Palikot, corre el peligro de desaparecer si la estrella de su líder se apaga como ya ha pasado en multitud de ocasiones. Los partidos personalistas suelen tener poco recorrido ya que no se basan en un programa ideológico determinado si no en la popularidad de un líder que muy bien puede perderla.

El Partido Campesino seguirá siendo el socio de gobierno de Donlad Tusk. Su electorado se halla muy consolidado, atrayendo al votante rural conservador que huye de la demagogia radical del PiS.

La Alianza de la Izquierda Democrática ha perdido en estas elecciones gran parte de su electorado más joven en favor de un movimiento más fresco y moderno como es el RP. La SLD logra su peor resultado, un 8,2% de los votos y más si tenemos en cuenta que en 2001 ganaba las elecciones con el 41% de las papeletas. La evidente relación de gran parte de sus líderes con el antiguo sistema comunista lo alejan de una imagen de izquierda socialdemócrata moderna. Además la población no olvida que cuando estuvo en el poder la izquierda post-comunista, traicionando los principios que defendía, llevó a cabo una política ultra liberal que causó graves consecuencias económicas. Por tanto a la espera de una refundación y modernización del partido, la SLD corre el riesgo de quedarse fuera del Parlamento en las próximas elecciones si continúa en la misma trayectoria.

Los votantes polacos han roto la regla de que desde el estallido de la crisis ningún gobierno ha conseguido su reelección, aunque cabe destacar que Polonia fue excepcionalmente el único país europeo que no sufrió la crisis debido a un sector exterior en pleno crecimiento, los fondos europeos, un fuerte consumo interno y el uso del gasto público para reactivar la economía. Parece que por primera vez se está consolidando un sistema de partidos en Polonia, con la PO en el centro, el PiS a la derecha y el RP y SLD a la izquierda. Aun es necesario ver como se va a desarrollar la izquierda, ya que el carácter personalista del RP no acaba por consolidar el sistema. La baja participación, 48,9%, es alarmante y debería ser un tema al que los políticos polacos tendrían que dedicar más atención. Durante los próximos años Polonia seguirá gobernada por el PO con Tusk a la cabeza. No serán unos años con grandes sobresaltos aunque tendencias políticas tan contrarias como las del PiS y RP representadas en el Parlamento prometen debates muy apasionados. Tusk continuará combinando políticas neoliberales como las privatizaciones con la consolidación de un sistema de bienestar polaco hasta ahora muy débil. Pero las medidas de austeridad también afectarán a Polonia ya que su déficit aun está en niveles muy elevados, 7,9% del PIB en 2010 y su deuda pública en la cifra récord de 53% del PIB.




Escaños 2011
Escaños 2007
% Votos 2011
% Votos 2007
Nº Votos 2011
Nº Votos 2007
Plataforma Cívica
206
209
39,2%
41,5%

6.701.010
Ley y Justicia
158
166
29,9%
32,1%

5.183.477
Movimiento Palikot
40
.
10%
.

.
Partido Campesino
28
31
8,4%
8,9%

1.437.638
Izquierda Democrática
27
53
8,2%
13,2%

2.122.981
Otros
1
1
4,3%
4,3%

697.096



Partido más votado por circunscripción

miércoles, 5 de octubre de 2011

Elecciones en Letonia, los votantes dan la espalda a los oligarcas



Cartel electoral de Ainars Slesers uno de los oligarcas más conocidos en Letonia

20 años de democracia no han sido suficientes en Letonia para formar un sistema de partidos estable, los grupos políticos aparecen y desaparecen de elección a elección y las principales personalidades crean, dividen y disuelven movimientos políticos a su antojo. No obstante podemos resumir el devenir político de esta joven república báltica en tres tendencias: la importancia de los partidos fundados por oligarcas, la profusión de partidos de ideología conservadora y el papel jugado por la minoría rusa. Si habéis leído mi artículo sobre las minorías rusas en los países bálticos os acordareis que Letonia es un país en el que cerca de un tercio de la población es rusa. 5 décadas de ocupación soviética han provocado por un lado que una minoría rusa importante siga presente en el país y por otro lado la presencia de un fuerte nacionalismo conservador entre la población étnicamente letona que ha acaparado gran parte del proceso político democrático desde la independencia del país en 1991. En respuesta a este nacionalismo a veces exacerbado de gran parte de los partidos políticos letones, los rusos se han ido organizando en torno a otro partido, esta vez de ideología cercana a la socialdemocracia. Por último los oligarcas también han jugado un papel nada desdeñable en la política letona. Esta importancia se debe al funcionamiento del propio sistema, al no haber una ley de financiación de partidos políticos hasta recientemente, estos sólo se podían financiar gracias a grandes donaciones, y los oligarcas son los que más dinero disponen. Los oligarcas letones son, como pasó en Rusia, el producto de una opaca y rápida privatización del aparato estatal soviético en Letonia. De este proceso surgieron grandes fortunas muchas de las cuales no dudaron en formar sus propios partidos políticos para defender sus intereses en el Parlamento. Siendo estos partidos los que tenían un mayor acceso a financiación gracias a sus patrones oligarcas, sus resultados electorales han sido excelentes. El poder de los oligarcas no ha ido sino creciendo gracias al boom neoliberal que dejo a Letonia sin casi regulación bancaria, lo que a la larga le llevaría a ser uno de los países más afectados por la crisis financiera internacional de 2008.

Revolución de los Paraguas
Volviendo varios años atrás, en las elecciones de 2006 los partidos oligárquicos lograron su mejor resultado hasta entonces. El Partido Popular (TP) , la Unión de Verdes y Agricultores (ZZS) y el Primer Partido de Letonia (LPP), todos ellos partidos fundados y dirigidos por oligarcas locales lograron la mayoría absoluta. En cambio los partidos conservadores y nacionalistas apenas lograron el 20% de los votos y el partido rusófono Centro de la Armonia (SC), todavía poco implantado, lograba el 14,4% de los votos. Pero justo con su aplastante victoria los oligarcas provocaban el comienzo de su lenta caída. La primera derrota fue en julio de 2007 cuando la presidenta del país Vaira Vike-Freiberga anunciaba un referéndum para frenar los intentos de los oligarcas por controlar las fuerzas de seguridad del país. En noviembre de eses mismo año la llamada Revolución de los paraguas, ya que era un día muy lluvioso y las multitudes congregadas en las calles se manifestaba con los paraguas abiertos, provocaba la dimisión del primer ministro Aigars Kalvitis, del gobernante partido oligárquico TP. Este episodio podría considerarse como el principio del fin del poder de los oligarcas en Letonia.

Valdis Dombrovskis
Las brutales consecuencias de la crisis económica en Letonia dejaron en evidencia el corrupto sistema político y económico que los oligarcas habían construido, con el beneplácito de los partidos conservadores. Debido a su modelo ultraliberal, Letonia, el paraíso neoliberal y modelo económico de parte de la derecha europea, se derrumbó. El PIB descendió en un año un espectacular 18%, llegando a bajar en total un 25%; el desempleo subió hasta superar el 20%. El país sólo se pudo salvar de la bancarrota gracias a un préstamo de 7 mil millones de euros del FMI, la UE y el Banco Mundial. Ante este panorama los oligarcas fueron alejándose del poder y los partidos conservadores, hasta entonces en la retaguardia comenzaron a pasar a un primer plano. A partir de la primavera de 2009 Valdis Dombrovskis, de la alianza conservadora Unidad lograba ser primer ministro, y comenzó una política de recortes (13-15% del PIB) que si bien ha permitido al país volver a crecer (el último año a un buen 3%) no ha logrado bajar la tasa de desempleo del 17%. Un porcentaje elevadísimo teniendo en cuenta que Letonia es un país con muy poca asistencia social debido a años de políticas neoliberales.

Valdis Zatlers
En este contexto de caos económico y social en octubre de 2010 fueron convocadas nuevas elecciones en las que los partidos conservadores lograron un buen resultado, aunque los oligarcas seguían teniendo un peso considerable en el parlamento letón. La alianza conservadora Unidad lograba un 31,2% de los votos y los nacionalistas de la Alianza Nacional lograban un 7,7%. La alianza de partidos oligárquicos LPP lograba el 7,7% de los votos y la ZZS un 19,7%. Por último el partido rusófono SC subía hasta el 26% de los votos. Por su parte el antiguo partido gobernante TP se disolvió para evitar investigaciones por financiación irregular. Debido al rechazo frontal de los partidos conservadores a formar gobierno con los rusófonos del SC, a los que acusaban de estar financiados por Putin y su partido Rusia Unida, tuvieron que hacerlo con los oligarcas del ZZS. Pero poco después, en Mayo de 2011 estalló la crisis definitiva. Ante la negativa del Parlamento, especialmente del ZZS pero también del SC, a aprobar la investigación judicial por corrupción del oligarca, líder del LPP y antiguo Ministro de Transportes Ainars Slesers, Valdis Zatlers, presidente letón desde julio de 2007 convocó un referéndum que pedía el apoyo popular para disolver el Parlamento y convocar nuevas elecciones. Con un 94,3% de los votos a favor en la consulta popular, Zatlers disolvía el Parlamento, convocaba elecciones y anunciaba la creación de un nuevo partido el Partido Reformista de Zatler (ZRP) cuya principal misión era desterrar a los oligarcas de la vida política letona. El presidente Zatler colocaba a tres oligarcas en su punto de mira, el propio Slesers del LPP, el líder del ZSS y alcalde de Ventspils Aivars Lembergs y el antiguo primer ministro y ex miembro del TP Andris Skele. Slesers respondió renombrando su partido como el Partido Reformista de Slesers. Con esta atmósfera cuasi revolucionaria el pasado 17 de septiembre los letones acudieron a las urnas a elegir un nuevo parlamento.

Nils Usakovs
La contienda entre Zatlers, los oligarcas, los rusófonos y los partidos conservadores clásicos agrupados en torno a Unidad ha tenido dos claros vencedores en las elecciones: el partido reformista de Zatlers (ZRP) y el pro-ruso SC. Con un 28,4% y 31 diputados, el SC se coloca en primer lugar por primera vez en su historia. El partido pro-ruso ha logrado movilizar a la minoría rusa, pero no ha logrado atraer a una masa importante de votantes letones a pesar de ser el único partido del centro-izquierda. La popularidad de su líder, el alcalde de Riga Nils Usakovs, ha podido se otro factor determinante en la vitoria del SC. En segundo lugar con 20,8% de los votos y 22 diputados se sitúa el partido de Zatler que logra una excelente entrada en el Parlamento letón. En tercer lugar se sitúan los conservadores de Unidad del primer ministro Valdis Drombovskis con el 18,8% y 20 escaños. Pierde casi la mitad de sus votante muy probablemente en favor del ZRP. La Alianza Nacional sube del 7,7% al 13,9% y se queda con 14 diputados. El partido oligárquico ZZS baja hasta el 12,2% de los votos y 13 diputados. Por último el partido de Slesers tan sólo logra un 2,4% de los votos y se queda sin representantes parlamentarios. Gran parte de los distritos antes controlados por estos partidos pasan a manos del ZRP.

Junto a la casi desaparición del parlamento de los oligarcas, tan sólo resta el ZZS y sus 13 diputados, las elecciones han constatado la gran regionalización de los partidos en Letonia. Si veis el mapa de los resultados electorales (al final del post) podéis observar dicha regionalización. El partido rusófono SC gana en los distritos donde los rusos son mayoría, es decir, la capital del país Riga (centro) y el Sur-este. En Riga el SC logra el 41,6% de los votos y en Daugavpilis, la ciudad con mayor población rusa en Letonia logra el 71,7%. El partido oligárquico ZZS obtiene una clara victoria en su feudo de Ventspils (extremo noroeste del país) con el 38% de los votos. El resto del país está repartido entre el partido de Zatlers y Unidad ya que ambos comparten una ideología conservadora muy popular en las zonas rurales.

A pesar de contar con 5 partidos en el Parlamento sólo existe una opción de gobierno viable, la formada por el partido de Zatler, Unidad y la Alianza Nacional. Esto se debe a que a pesar de que el SC es el primer partido, ningún partido letón está dispuesto a gobernar con los pro-rusos. Por otro lado Zatler se ha negado a colaborar con los oligarcas del ZZS. La proximidad ideológica entre el partido de Zatler y Unidad es tanta que no sería raro que se fusionaran en un futuro para contrarrestar el peso del ascendente Centro de la Armonía (SC). Letonia por tanto se ha librado por algún tiempo de los oligarcas, ya una fuerza residual en el parlamento, pero será gobernada durante los próximos años por una coalición de partidos personalistas, entre ellos un partido nacionalista, que seguirán una ideología no muy lejana de aquella que llevó al país a la ruina durante la década pasada. Por otro lado, la minoría rusa, a pesar de haber apostado sin ninguna duda y con mucho éxito por la vía democrática para reclamar sus derechos, seguirá una vez más marginada de la toma de decisiones.


Escaños 2010
Escaños 2011
% Votos 2010
% Votos 2011
Nº Votos 2010
Nº Votos 2011
Centro de la Armonía
29
31
26%
28,4%
251.397
259.930
Partido Reformista de Zatler
.
22
.
20,8%
.
190.853
Unidad
33
20
31,2%
18,8%
301.424
172.567
Alianza Nacional
8
14
7,7%
13,9%
74.028
127.208
Unión Verdes y Agricultores
22
13
19,7%
12,2%
190.025
111.955
Primer Partido de Letonia
8
0
7,7%
2,4%
73.877
22.131




viernes, 30 de septiembre de 2011

Elecciones en Dinamarca, el centro-izquierda gana a pesar de los socialdemócratas



10 años de gobierno conservador en Dinamarca terminaron el pasado 15 de septiembre con la victoria de los partidos del bloque de centro-izquierda (bloque rojo) en las elecciones. Con un sistema electoral muy lejos del bipartidismo de algunos países europeos, en Dinamarca hasta 8 partidos políticos luchaban por lograr una representación significativa en la Folketing o Parlamento. Con la crisis económica como telón de fondo, que también ha azotado al pequeño país escandinavo a pesar de hallarse fuera de la zona Euro, dos bloques de partidos han luchado hasta el último escaño por ver quién gobernaría el país durante los siguientes 4 años. Por un lado la coalición conservadora que gobernaba el país desde 2001 estaba formada por el partido Liberal Conservador Venstre, a cuyo partido pertenece el primer ministro Lars Lokke Rasmussen, que sustituyó a Anders Fogh Rasmussen, también del mismo partido, al abandonar el gobierno para ser Secretario General de la OTAN. Junto a Venstre el otro pilar de la coalición era el Partido Conservador, tradicional aliado de los liberal conservadores a la hora de formar gobierno. Además contaban con el apoyo parlamentario de la pequeña Alianza Liberal y del poderoso y populista Partido Popular Danés, muy cercano a la extrema derecha y tercera fuerza parlamentaria en Dinamarca. Juntos, los 4 partidos controlaban 94 de los 179 escaños del Parlamento. Pero tras 10 años de gobierno conservador, una mala situación económica y la ausencia en la campaña política de temas tan beneficiosos electoralmente para la derecha como la inmigración o la Unión Europea, han acabado por minar el amplio apoyo popular de la coalición en el poder y provocar la victoria de los partidos de la oposición.

Lars Lokke Rasmussen
Desde hacía ya año y medio las encuestas apuntaban a que la coalición conservadora había perdido el apoyo de la mayoría de la población. La salida como primer ministro de Fogh Rasmussen en 2009, muy popular en Dinamarca, y su sustitución por el menos carismático Lokke Rasmussen, no hizo más que debilitar la situación de la coalición. Además la necesidad por parte del gobierno conservador de mantener el apoyo de la extrema derecha le hacía rehén de esta y colocaba a Dinamarca como uno de los países con políticas más extremistas de toda Europa. El advenimiento de la crisis y sus consecuencias macroeconómicas, un 10% de paro juvenil y un déficit de 4,9%, muy malas para un país escandinavo, movilizaron a la opinión pública contra el gobierno de Lokke Rasmussen. Pero las encuestas sobre todo castigaban a los otros dos grandes partidos de la derecha; el Partido Conservador, cuyas luchas internas por el liderazgo del partido mancharon su imagen, y los populistas extremistas del Partido Popular Danés, en este caso por la incapacidad de estos para dar solución a los problemas económicos y por el efecto de los atentados de Oslo (llevados a cabos por un extremista noruego). Paralelamente las encuestas mostraban que los partidos del centro-izquierda, entonces en la oposición, iban ganando apoyo popular. El principal partido de la oposición, el Partido Socialdemócrata, parecía haber recuperado al electorado perdido en 2001, cuando por primera vez desde 1924 dejó de ser el partido con más votos. Pero según se fueron acercando las elecciones, la intención de voto de los socialdemócratas fue disminuyendo, hasta situarla al mismo nivel que Venstre, el partido más votado desde 2001 y el principal miembro de la coalición que gobernaba el país. El Partido Socialista, cuarta fuerza política del país, tampoco lograba subir en las encuestas, en cambio los otros dos partidos de la izquierda danesa, el Radicale Venstre o Social Liberales y la Alianza Roji-Verde se disparaban en cuanto a intención de voto. Lo que apuntaban las encuestas es que a pesar de que los dos grandes partidos daneses, Venstre a la derecha y el Partido Socialdemócrata a la izquierda, se mantenían igual en cuanto a apoyo popular, su victoria dependería de que sus socios minoritarios de derecha o izquierda sacaran un buen resultado, lo que ponía a la izquierda en mejor situación por el despunte de Social Liberales y Roji-verdes.

Hellen Thorning-Schmidt
Las encuestas no fallaron y el día 15 la candidata Socialdemócrata Hellen Thorning-Schmidt logró, gracias sobre todo a los buenos resultados del resto de partidos del centro-izquierda, ganar las elecciones y posicionarse como nueva primera ministra de Dinamarca. De los 179 diputados del Folketing danés, el bloque rojo formado por los Socialdemócratas, el Partido Socialista, los Social Liberales y la Alianza Roji-verde, lograron 89 diputados y un 50,2% de los votos frente a los 86 diputados y 49,8% de los votos del bloque conservador (Venstre, Partido Conservador, Partido Popular Danés y Alianza Liberal). Una ajustada victoria en cuanto a votos pero rotunda en cuanto a escaños. Además la coalición de centro-izquierda sumaría 3 de los 4 diputados que representan a los territorios autónomos de las Islas Feroe y Groenlandia en el parlamento danés. Si analizamos los votos por partido vemos que el partido más votado sigue siendo Venstre, que logra un 26,7% de los votos y sumar un diputado quedándose con 47. Los 10 años de desgaste no han acabado por afectar ni al partido ni al primer ministro Lokke Rasmussen. Los Socialdemócratas, partido más votado entre 1924 y 2001 logra un 24,8% de los votos y 44 diputados, uno menos que en 2007. Consigue mantener casi el 100% de sus votantes pero cosecha el peor resultado electoral desde 1906 . A pesar de ello será el núcleo del futuro gobierno de Hellen Thorning-Schmidt ya que es el partido de centro-izquierda con más votos. En tercera posición sigue el extremista Partido Popular de Pia Kjaersgaard que pierde 3 de sus 25 diputados y 40 mil votantes, a pesar de ello sigue siendo la tercera fuerza política, todo un récord en Europa para un partido de extrema derecha. Los Social Liberales con 17 diputados y el 9,5% de los votos pasan de ser la sexta a la cuarta fuerza política debido a su espectacular subida llegando a casi duplicar su número de votos. En quinto lugar se sitúa el Partido Socialista que sufre un batacazo perdiendo 7 de sus 23 diputados y 120 mil votos. Gran parte de su electorado se ha pasado a la más izquierdista Alianza Roji-Verde que triplica sus votos y pasa de 4 a 12 diputados. Los conservadores, uno de los partidos tradicionales de la política danesa y miembro de la coalición que gobernaba hasta entonces sufre un descalabro y pasa de los 18 a los 8 diputados, perdiendo a más de la mitad de sus votantes. Por último la pequeña Alianza Liberal, formada por antiguos miembros de Venstre y del Partido Conservador, se afianza y pasa de los 5 a los 9 escaños con el 5% de los votos. Por tanto hasta 8 partidos logran cierto peso en el Parlamento Danés y la formación del próximo gobierno será ardua. A favor Hellen Thorning-Schmidt tendrá que el sistema parlamentario danés se basa más en acuerdos puntuales entre el gobierno y otros partidos que en la formación de grandes coaliciones, lo que le permite una mayor flexibilidad a la hora de escoger distintos socios dependiendo de lo que se vaya a votar.

El partido Socialdemócrata a pesar de haber conseguido el peor resultado electoral en un siglo ha logrado mantener a la casi totalidad de votantes que tuvo en 2007, a pesar de la ascendente estrella de otros partidos de izquierda. No ha sufrido el trasvase de votos hacia otros partidos y sigue manteniendo los mismos feudos electorales, sobre todo en las zonas urbanas de Copenhague, Aarhus, Odense y Aalborg. Sus propuestas de una mayor inversión pública, reforma laboral y aumento de impuestos a las rentas más altas para mitigar las consecuencias de la crisis ha logrado un apoyo popular amplio que deberá ahora contentar. Además los socialdemócratas pretenden flexibilizar la extremadamente severa política migratoria, aunque no en exceso y cerrar los controles fronterizos que el anterior gobierno impuso en la frontera con Alemania y que tanto revuelo causó, ya que de hecho incumplía el espacio Schengen. Para ello deberá contar con el apoyo del resto de partidos del centro-izquierda. Los dos posibles miembros del futuro gobierno junto a los Socialdemócratas son los Social Liberales, muy a favor de la inmigración y la multiculturalidad pero más conservadores en cuanto a la economía, y los socialistas, que siguen defendiendo un modelo económico socialista aunque en los últimos años, en su afán por mostrarse como un posible miembro de gobierno responsable, llegaron incluso a apoyar los presupuestos del gobierno conservador en el 2008. Los socialistas nunca han formado parte de un gobierno pero han spoyado a diversos gobiernos de los Socialdemócratas. Los roji-verdes estarán sin lugar a dudas fuera del gobierno debido a su incompatibilidad ideológica con socialdemócratas, su línea es más izquierdista incluso que la de los socialistas, pero serán imprescindibles para el nuevo gobierno de cara a importantes votaciones, sobre todo en cuanto a política económica. Al igual que en el anterior gobierno el Partido Popular radicalizó hacia la derecha al gobierno de Lokke Rasmussen, la Alianza Roji-Verde intentará conseguir lo mismo con el gobierno socialdemócrata pero en la dirección contraria. Todos estos partidos de centro-izquierda deben gran parte de su peso político a su apoyo electoral en Copenhague. En la capital el partido Socialdemócrata logró un 19% de los votos, los Social Liberales un 16,7%, los Roji-verdes 16,6%, Venstre 15,2% y el Partido Socialista un 12,4%. Los Socialdemócratas también podrán contar con el apoyo parlamentario de la extrema derecha en asuntos económicos ya que el Partido Popular se acerca a las posiciones del centro-izquierda en cuanto a la economía (subida de impuestos a las rentas altas, mayor gasto público).

Venstre puede estar satisfecha con su resultado electoral, como principal partido de la derecha y tras 10 años gobernando el país, los liberales conservadores han logrado mantener sus históricos resultados de 2007 e incluso superarlos. Pero el debacle electoral de su principal socio en el gobierno, los conservadores, han acabado con sus esperanzas de mantenerse en el poder. Venstre, que cuando fue fundado en 1910 era un partido agrario y desde entonces tiene su gran masa de apoyo en las áreas rurales (sobre todo en el sur de la península de Jutlandia donde la población es más religiosa y conservadora), se ha consolidado como el principal partido de la derecha. El Partido Conservador, que llegó a gobernar el país entre 1982 y 1993 y mucho más popular en las áreas urbanas que Venstre y más conservador en sus políticas económicas, ha perdido su oportunidad de seguir siendo un partido imprescindible a la hora de formar gobierno. Para Venstre la caída de los conservadores en desgracia sólo le deja un futuro socio viable para lograr un apoyo mayoritario en el parlamento en unas futuras elecciones, la extrema derecha, lo que le deja en una difícil tesitura. La pequeña Alianza Liberal va afianzándose y podría ser el futuro socio ideal de Venstre, aunque la primera sea mucho más liberal en asuntos como el matrimonio homosexual, la inmigración etc... Los Social Liberales, aunque apoyen a los Socialdemócratas y podrían estar en su gobierno, comparten posiciones cercanas con Venstre en lo económico y no se podría descartar una colaboración política entre ambas formaciones si el gobierno de Hellen Thorning-Schmidt gira demasiado hacia la izquierda.

En cuanto a los temas clásicos de la política danesa, la inmigración y la Unión Europea, han quedado en un segundo plano frente a la situación económica, principal preocupación para ¾ de los daneses, lo que explica en parte los malos resultados de la extrema derecha ya que se beneficiaba mucho electoralmente de estos asuntos. La difícil situación por la que pasa la UE y la eurozona ha dejado el tema fuera del debate electoral ya que ninguna fuerza política ha defendido la entrada en el euro como suele ser común, sobre todo entre los Socialdemócratas y los Social Liberales. A pesar de ello Hellen Thorning-Schmidt pretende convocar referéndums para decidir sobre una mayor cooperación del país en materias de justicia y defensa con la UE. Para ello tendrá no sólo que lidiar con el euroescepticismo de la extrema derecha sino también de parte de la izquierda, sobre todo de la Alianza Roji-Verde cuyo escepticismo es tal que en el Parlamento Europeo algunos de sus miembros se han asociado con movimientos extremistas de derecha de otros países europeos. Todo ello sin olvidar que el próximo mes de enero Dinamarca asumirá la presidencia rotatoria de la UE. 

Cómo última reflexión sería importante señalar tres aspectos de las elecciones danesas que se encuadran dentro de fenómenos políticos más amplios. Por un lado las elecciones danesas son un ejemplo más de cómo desde el estallido de la crisis económica en 2008 casi ningún gobierno que se ha enfrentado a las urnas ha logrado la reelección. Segundo, la victoria del centro-izquierda se enmarca en una nueva ola que sólo acaba de empezar de recuperación de la izquierda frente a dos años nefastos, otro ejemplos serían las sucesivas elecciones regionales alemanas, las elecciones al Senado francés o las legislativas en Letonia, en todos estos casos el centro-izquierda ha ganado, y se espera que el fenómeno continúe en países como Francia, Italia o Alemania. Por último en el centro-izquierda parece que se esté dando un proceso de diversificación: dónde antes había un sólo partido que monopolizaba este espectro político, principalmente un partido socialdemócrata, ahora varios partidos de tendencias diferentes dentro de la izquierda se reparten este electorado. Ecosocialistas, verdes, social-liberales o anti-capitalistas compiten ahora por un voto que antes iba directamente a los socialdemócratas o en menor grado a los comunistas. Dinamarca es sólo un ejemplo más de este proceso que ya se está dando en Alemania, Francia, Italia o España.


Participación 87,7%
Escaños 2007
Escaños 2011
% Votos 2007
% Votos 2011
Nº Votos 2007
Nº Votos 2011
Venstre
46
47
26,2%
26,7%
908.472
947.725
Socialdemócratas
45
44
25,5%
24,9%
881.037
879.615
Partido Popular
25
22
13,9%
12,3%
479.532
436.726
Partido Social Liberal
9
17
5,1%
9,5%
177.161
336.698
Partido Socialista
23
16
13%
9,2%
450.975
326.192
Alianza Roji-Verde
4
12
2,2%
6,7%
74.982
236.860
Alianza Liberal
5
9
2,8%
5%
97.295
176.585
Partido Conservador
18
8
10,4%
4,9%
359.404
175.047
Otros
4
4
0,9%
0,9%
30.562
29.920

Partidos más votados según circunscrip. V(Venstre) A(Socialdem.) B(Social Liberal) O(Roji-verdes) (zona aumentada Copenhague)




miércoles, 7 de septiembre de 2011

Quién es quién en las primarias republicanas



Uno de los temas de actualidad al que más atención prestaremos en Retaliacion + IVA serán las primarias en el partido Republicano para elegir un candidato de cara a las presidenciales de 2012 en los EEUU. Queda poco más de un año para que los estadounidenses vuelvan a elegir en las urnas a su Presidente. Con un panorama económico y social tan agitado la reelección de Obama no es nada segura a pesar de la victoria arrolladora con la que llegó a la Casa Blanca hace ya 3 años. Mientras que desde el partido Demócrata se apoyará masivamente a Obama como candidato para la reelección, en el partido Republicano se enfrentan a la ardua tarea de elegir su propio candidato. Como viene siendo tradición en EEUU, el proceso de primarias es todo un evento político ya que suelen ser muchos los candidatos que luchan durante meses por hacerse con la mayoría de apoyos dentro del partido. En este caso el partido republicano y sus millones de simpatizantes y militantes se enfrentan a la decisión de elegir entre más de 10 posibles candidatos una figura que les represente en unas elecciones en las que los republicanos tienes muchas posibilidades de ganar.

Las primarias en EEUU son un proceso muy abierto, las candidaturas de figuras importantes suelen superar la decena, sin contar con candidatos menores y se caracteriza por su imprevisibilidad, no es difícil que candidatos inicialmente poco populares acaben por ganar. ¿Cómo es el poceso de primarias? para ir eliminando a los candidatos con menos posibilidades a partir de febrero se celebran elecciones en diferentes Estados en los que los militantes y simpatizantes del partido Republicano votan por sus candidatos preferidos. Durante varios meses estas elecciones se van celebrando por todos los Estado del país. De este modo el candidato que gane en cada Estado va ganando representantes que le apoyarán en la Convención Nacional Republicana donde quien tenga más apoyos será nombrado candidato a la presidencia. Paralelamente los candidatos menos votados se irán retirando, bien porque matemáticamente acaban sin tener posibilidades de acumular suficientes apoyos en la Convención Nacional o bien se retiran porque ven que los resultados no son los esperados y su candidatura es inviable.

Las primarias republicanas, que comenzarán oficialmente en febrero con las votaciones en el Estado de Iowa, se verán muy influenciadas por el Tea Party. Esta corriente ultraconservadora, surgida a raíz de la victoria de Obama, ha ido ganando un gran peso en el seno del Partido Republicano, sobre todo a partir de las elecciones legislativas del otoño pasado (las Midterm elections, porque se producen a mediados del mandato presidencial). Unos 100 congresistas y entre 15-20 senadores se sitúan en este ala extrema del partido. Por tanto será interesante ver cómo reaccionan cada uno de los candidatos frente a las demandas del Tea Party. Por otra parte la cadena ultraderechista Fox News no cejará en su empeño de influir lo más posible en el resultado de las primarias, apadrinando o denostando a los diferentes candidatos.

A pesar de que hasta febrero no empieza realmente la batalla en el partido Republicano, ya se ha producido el primero de los enfrentamientos electorales entre los más de 10 candidatos. A lo largo del año se han ido celebrando pequeñas votaciones a lo largo del país en las que los votantes han manifestado que candidatos tienen más apoyo ciudadano. La más importante de ellas desde los años 70 es la llamada Encuesta de Ames (Ames Straw Poll). Se trata de una votación en la que voluntariamente los candidatos republicanos participan y en la que los habitantes de la ciudad de Ames, Iowa, les pueden votar. Es un primer termómetro sobre quienes son los candidatos preferidos por los ciudadanos. A pesar de que no suelen votar más de 20 mil personas la mayoría de candidatos a las primarias republicanas se presentan en Ames a hacer campaña durante los días en los que se celebra la Encuesta. En este caso la mayoría de candidatos han participado activamente en la Encuesta. ¿De qué sirve la Encuesta de Ames? Por un lado para los candidatos con un menor renombre es una oportunidad para lograr un buen resultado y situarse a la cabeza de las encuestas, como ha ocurrido este año con Michele Bachmann. También sirve para que algunos candidatos vean su apoyo real y, si no es el esperado, puedan retirarse antes de seguir con las costosísimas campañas políticas de las primarias. Pero no son indicativas de nada, en la Encuesta de Ames de 2007 el candidato Mitt Romney logró un gran éxito con el 31,6% de los votos, en cambio John McCain, el que sería ganador final de las primarias y candidato republicano a las presidenciales, se quedo con el 0,7% de los votos. Por último en la Encuesta de Ames los votantes pueden libremente escribir el nombre de candidatos que o bien no se han presentado a la Encuesta o bien aún dudan si entrar en las primarias, a esto se le llama write-ins. En este caso el gobernador de Texas Rick Perry logró un 4,3% de los votos mediante este sistema, lo que le animó a entrar de lleno a las primarias republicanas. Los resultados de la Encuesta de Ames celebradas el 11 de agosto son los siguientes:


Candidatos Nº Votos % Votos
Michele Bachmann 4823 28,6%
Ron Paul 4671 27,7%
Tim Pawlenty 2293 13,6%
Rick Santorum 1657 9,8%
Herman Cain 1456 8,6%
Rick Perry (write-in) 718 4,3%
Mitt Romney 567 3,4%
Newt Gingrich 385 2,3%
Jon Huntsman 69 0,4%
Otros 253 1,5%
Total 16892 100%

A continuación os presento a los principales protagonistas de la primarias republicanas

Los favoritos

Rick Perry. Es el candidato más consolidado en las encuestas a nivel nacional, las últimas le colocan como favorito con el 27% de los apoyos. Cuenta con una gran experiencia política ya que es gobernador de Texas desde el año 2000, cuando sucedió a George W. Bush. Muy próximo al ala más radical del partido Republicano pero también con gran apoyo en el resto de sectores del partido por su gestión en Texas; es el Estado con una mayor creación de empleo en un contexto nacional de alta tasa de paro y crisis económica (hasta 1 de cada 2 empleos creados en todos los EEUU se producen en Texas). Ideológicamente viene acompañado de todo el pack del buen ultraconservador: favorable a la desaparición de los impuestos (como es el caso de Texas), apoyo de las grandes empresas petroleras, negación del cambio climático, malas relaciones con la población hispana, muy religioso y contrario al matrimonio gay. Tiene grandes probabilidades de ganar debido a que cuenta con el apoyo de las dos alas del partido: el Tea Party y el sector más clásico y moderado del partido Republicano.

Mitt Romney. Hasta que entró Rick Perry en las primarias en la víspera de la celebración de la Encuesta de Ames, Romney era el favorito. A favor cuenta con una gran experiencia política como gobernador de Massachusetts entre 2003 y 2007, una eficaz maquinaria política de campaña y una imagen de moderado que puede atraer el voto de independientes y demócratas descontentos con Obama. En contra cuenta con una imagen demasiado artificial, fría y con escaso carisma y el rechazo del electorado más ultra, tanto por su condición de mormón, nada bien visto por los sectores más ultrareligiosos, y por su plan de Sanidad pública aplicado en Massachusetts y que sirvió como ejemplo para el plan de Sanidad Pública de Obama, tan odiado por el Tea Party. A pesar de descender a segunda posición, sigue con grandes posibilidades al contar con un 22% de los apoyos en las encuestas.

Michele Bachmann. Una de las principales promotoras del Tea Party, la congresista Michele Bachmann, miembro de la Casa de Representantes desde 2007 por Minnesota, logró darse a conocer mundialmente gracias a su victoria (ajustada) en la Encuesta de Ames el pasado 11 de agosto. Hasta entonces había destacado en algunos debates celebrados entre los candidatos republicanos, pero no fue hasta la victoria en Ames que se colocó como una de las candidatas favoritas. Como miembro del Tea Party pertenece al ala más ultraderechista del partido republicano y su ideología le lleva a planteamientos tan extremistas como que a pocas horas de la suspensión de pagos de EEUU en julio-agosto de este año animó a los congresistas republicanos a no votar a favor de un posible acuerdo que salvaría al país de la bancarrota. Desde la entrada de Rick Perry en la lucha de las primarias Bachmann ha descendido en las encuestas debido a que ambos comparten el mismo espectro ideológico, aunque Perry goza de una mayor popularidad tanto por su experiencia política como por su presunta buena gestión económica. Con un 6% de apoyos en las últimas encuestas Bachmann tiene difícil remontar aunque todavía queda mucha carrera por delante.


Los otros candidatos

Herman Cain. Es el único de los principales candidatos que no procede de la esfera política sino de la económica y mediática. Es el único afroamericano que se presenta este año a las primaras republicanas. Tiene gran predicación entre el Tea Party pero también tiene grandes contactos en el mundo económico y mediático. A pesar de que no se sitúa entre los favoritos, podría ser un jugador relevante durante el resto de las primarias.

Rick Santorum. Como antiguo senador por Pensilvania entre 1995 y 2007 y congresista en la Cámara de Representantes entre 1991 y 1994, es el candidato con mayor experiencia política. Aunque pertenece al ala clásica del Partido republicano, sus planteamientos ideológicos coinciden en numerosos campos con el ala más radical. Según vaya desarrollándose la campaña podría lograr mayores apoyos.

Newt Gingrich. Un clásico dentro del Partido Republicano, Gingrich fue el azote de Bill Clinton durante su presidencia. Desde 1979 hasta 1999 fue miembro de la Cámara de Representantes, a partir de 1995 siendo su Presidente (tercera posición más relevante tras la de Presidente y Vicepresidente). Lideró el ataque contra Clinton por el escándalo Lewinsky mientras él mismo protagonizaba otro escándalo matrimonial. A partir de 1999 se retiró de la política pero desde entonces ha seguido siendo un peso pesado en el partido Republicano. Muy bajo en las encuestas, Gingrich tiene muy poca posibilidades aunque esté bien visto tanto en el ala clásica como en el sector más radical del partido.

Ron Paul. El más veterano de los candidatos, Ron Paul se presenta representando al ala libertarian. Un clásico en las primarias republicanas, fue congresista de 1976 a 1985 y desde 1997. Su ideología promueva a grandes rasgos la ausencia total del Estado en la vida política, económica y social del país. Es incluso partidario de que los EEUU dejen tranquilo a Irán, lo que le diferencia del Tea Party, con el que en otros campos coincide ideológicamente. Su hijo Rand Paul, senador por Kentucky, es una de las figuras más importantes del Tea Party. A pesar de que estuvo muy cerca de la victoria en Ames y de contar con un 8% de los apoyos en la última encuesta, no tiene ninguna posibilidad de ganar las primarias, sobre todo por lo radical (no por lo extremo sino por lo novedoso) y utópico de sus planteamientos.

John Huntsman. Es el más moderado de los candidatos. Diplomático, ex embajador en China y Singapur, tiene importante experiencia política al ser gobernador de Utah entre 2005 y 2009. Su moderación le garantiza importantes apoyos en los Estados más liberales del noreste, pero sus planteamientos están muy lejos de los del Tea Party, sector fundamental a la hora de ganar las primarias. Además su condición de mormón, al igual que Mitt Romney, le alejan del apoyo del ala ultraderechista. A la cola de las encuestas su única posibilidad es quedar primero en alguno de los Estados de Nueva Inglaterra (Noreste) y de este modo entrar en la primera división de las primarias.


El candidato retirado

Tim Pawlenty. El ex gobernador de Minnesota fue de los primeros en anunciar su candidatura a las primarias republicanas. Pero nunca logró situarse a la cabeza de las encuestas, sobre todo porque Mitt Romney, el gran favorito hasta agosto, acaparaba el mismo lugar en el espectro ideológico. Tras invertir cerca de 1 millón de dólares en la campaña en Ames, logró un tercer puesto que no fue suficiente para Pawlenty y retiró su candidatura. Podría parecer una decisión extrema debido sobre todo a que al fin y al cabo en Ames sólo participaron unas 20 mil personas, lo que no es para nada representativo, pero Pawlenty vio que aun gastando mucho dinero, en este caso un millón de dólares, un tercer puesto era insuficiente y que para lograr un buen resultado tendría que gastar cantidades ingentes de dinero demasiado difíciles de recaudar para su campaña.


Los posibles candidatos

Sarah Palin. Es la madrina del Tea Party y ex candidata a la vicepresidencia junto al candidato republicano John McCain. Anteriormente había sido gobernadora de Alaska entre 2006 y 2009. Convertida en animal mediático, desde la Fox News defiende los planteamientos de Tea Party, amadrina candidatos y ataca a otros. Todavía no ha anunciado si se presentará a las primarias, porque a pesar de su popularidad entre los seguidores del Tea Party el resto de sectores del partido republicano le detestan. Además candidatos como Rick Perry y Michele Bachmann ya han ocupado su espacio ideológico. De todos modos según la última encuesta si se presentase a las primarias se colocaría en un nada desdeñable tercer puesto con el 14% de los votos. Si se presentase dividiría tanto el voto extremista que supondría un alivio para los candidatos más moderados.

Rudolph (Rudy) Giuliani. Famoso mundialmente por ser el alcalde de Nueva York durante el 11-S, representa al ala más liberal del partido Republicano. Durante las primarias de 2007, a pesar de ser uno de los favoritos, fue derrotado contundentemente por John McCain, lo que quizá le hace plantearse todavía más si presentarse a las primarias republicanas de este año. Si se presentase podría ser la sorpresa de las primarias ya que el aura del 11-S le podría colocar como candidato de consenso.

Os seguiré informando sobre los principales acontecimientos en las primarias republicanas...